A orillas del Tajo me senté y puse mis ojos en tus manos. Si estuvieras aquí. Te lo diría.
Huele a pez y a mar. Pero aquí no hay mar. Entonces por qué. Serán tus ojos. Ya no sé. Porque a veces. Este olor salado. Sabes cuando la mar está allí tan cerca tan cerquita. Y cuando las olas besan la playa y yo te besaría si estuvieras aquí. Porque te echo tanto de menos. Con sus besos salados. Huele a mar. Huele a tí.
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